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La Plata, Buenos Aires

viernes, 16 de julio de 2010


Con las manos entumecidas por el frío, escribimos una brevísima introducción a la nota que sacó el diario Hoy por la presencia de Pier en nuestra ciudad, mañana a las 21, en el Teatro Sala Opera (58 e/ 10 y 11). La acompañamos con un video al final del primer corte de su último disco, Popular Mística. ¡Mirá si será breve la introducción que ya terminó!

Pier se formó en 1995 a partir de una idea de los hermanos Agustín y Ramiro Cerezo. Tras editar su disco debut, la familia rockera sumó a sus filas a un tercer hermano, Eugenio, quien se ocupó de la batería y ayudó a concretar la segunda producción discográfica de la banda, El fuego Sagrado (2000). El tono de voz de su cantante tornó inevitables las comparaciones con el Indio Solari, ganando así fanáticos y detractores entre los fans ricoteros. Tras grabar cuatro discos y cosechar numerosos reconocimientos -entre los que se destacó el hit Sacrificio y Rock N Roll- en 2009 fueron producidos por Copi Corellano, ex tecladista de Héroes del Silencio, y actualmente vecino platense. El nuevo milenio materializó su militancia rocanrolera en un compilado que hace justicia: La ilusión que me condena (2010) defiende en resumidas cuentas lo que su creciente público vitorea desde hace años y la prensa especializada no sabe destacar. Sobre todo esto y mucho más hablamos con Ramiro Cerezo, voz principal del proyecto…
-¿Qué se espera para esta fecha en La Plata?
-La ciudad de las diagonales es para nosotros un lugar muy importante. Más que nada por la cantidad de bandas que salieron de ahí, lo que habla de una movida muy grosa. En cuanto al recital de Pier en sí, puedo decir que nosotros vamos a una fiesta, porque eso es lo que se genera: viene gente de todos lados, con sus trapos y sus ganas de pasarla bien. Nuestra misión es dejar todo en el escenario, la gente hace el resto.
-¿Qué ilusiones condenan a la banda?
-Las mismas que a nuestros seguidores; vivimos en una sociedad muy careta, donde se reprimen las pasiones, donde te marginan por cualquier boludez, donde todo es discusión… O sos de River o sos de Boca, de Estudiantes o Gimnasia. En este caso en particular, se discute si fumás, si cantás, si tomás… Nosotros tratamos de generar un lugar, un espacio, donde no te reprimas ni se discrimine, y cada uno pueda “ser” libremente.
-¿Qué cuestiones te inspiran para escribir las letras de Pier?
-Nosotros somos pibes que nacimos en un barrio de la ciudad, como cualquier hijo de vecino. Crecimos un poco a los golpes, o “aguantando moretones de insolentes” como dice una de nuestras letras, sin saber qué nos iba a deparar el destino. De eso se trata un poco la vida, ir aprendiendo y creciendo en una sociedad que es bastante hostil. Este tipo de sensaciones empiezan a comprender más profundamente en la adolescencia. Bueno, por suerte, o por desgracia, nosotros somos rockeros y tenemos el espíritu eternamente adolescente (risas).
-¿Cómo llegaron a trabajar con Copi Corellano?
-A Copi llegamos a través de Gustavo Rowek, un gran músico y gran amigo nuestro. Gustavo lo trajo a uno de nuestros recitales en Obras, y quedó encantado con la banda. Nos dijo que respiró una atmósfera muy similar a las que se vivían en los primeros recitales de Héroes del Silencio, allá en España. Eso fue para nosotros un halago que nunca podremos olvidar. A partir de allí nació una relación con él. Obviamente, tuvo que ver que nosotros somos fans de Héroes, y la participación de Copi con ellos y gran parte de la carrera de Bunbury en solitario hizo que arranquemos compartiendo afinidades musicales, y con el correr del tiempo, cuestiones personales. Estamos muy contentos y agradecidos por haberlo conocido. Su participación en el disco fue importantísima. Haber puesto sus conocimientos internacionales a disposición de nuestra música fue invaluable. Los resultados, a mi humilde entender, fueron excepcionales.
-El indio Solari dijo que no se reconoce en Pier. ¿Ustedes se reconocen en su música?
-Eso es correcto, no podía ser de otra manera. El Indio, si no es el más groso, es uno de los más grosos. Eso no se discute. Y no veo por qué debería reconocerse en Pier. Si bien ambos tenemos pasión por el rock, nosotros crecimos admirando a Los Redondos, y obviamente nos marcaron de muchas maneras, como a toda nuestra generación. Y más a los que tuvimos la posibilidad de participar de sus recitales. Ojalá podamos tener una trayectoria como la que desarrolló el Indio. Y no estoy hablando de masividad ni nada de eso. Hablo de poder desarrollar una carrera en base al esfuerzo y el sacrificio personal. Como la pudieron desarrollar ellos, y el resto de los grupos que, en definitiva, después de tantos años de batallarla tienen su reconocimiento.
-¿Creen que la prensa no apoya a las bandas populares tanto como lo hace con las de otros estilos?
-El rock es un movimiento que comenzó siendo marginal, y en definitiva lo sigue siendo. La diferencia es que ahora tenemos radios de rock, pero fuera de eso la cosa no cambió tanto, y los intereses del negocio no van de la mano de nuestros intereses. A nosotros nos gusta cuando nos difunden, pero si no lo hacen, nosotros seguimos igual. Por buena suerte y por trabajo, nuestro público nos reconoce. Siempre se suma gente nueva que valora y disfruta de nuestra entrega y hace de nuestros shows una fiesta en la que nosotros simplemente participamos de ella.

Federico Valenti
Diario Hoy

El barco fantasía, de su último disco Popular Mística:

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