Mañana toca Diego Frenkel en Ciudad Vieja, con un formato acústico de "tremenda proximidad con la gente", según grafica el ex líder de La Portuaria. Desde las 21:30 va a estar presentado El día después, su último material discográfico. Va una entrevista de Diagonales y un video del tema que abre el disco en cuestión.
Vía Diagonales
“Saldré, a la estepa/ saldré, sin vos/ sin vos./ El día después del día crucial/ el cielo es azul, azul especial/ segundos después del viento callar/ tu boca se siente tan fría/ Volviste a nacer/ volver a empezar/ el día después del día crucial/ camino sin pies/ el hielo austral/ mi grito estalló en el vuelo/ Saldré, a la estepa/ saldré, sin vos/ sin vos/ saldré, a la noche/ del tiempo sin vos, sin vos/ El día es azul, azul espacial / tu boca está fría/ del frío ancestral/ el día después del día crucial/ el día después del día", canta Diego Frenkel desde "El día crucial”, track número 1 de su flamante El día después y con este trabajo el rock argentino recupera a uno de los letristas más sensibles y talentosos que supo cobijar. Y ése trabajo discográfico será el que acerque al ex cantante de La Portuaria hasta la ciudad de La Plata, donde se presentará el próximo sábado, a las 21.30, en Ciudad Vieja (17 y 71).
Frenkel es sin dudas uno de esos artistas cuyo talento no siempre está bien reconocido. Por algún extraño mecanismo no es valorado en la magnitud que amerita. Él junto a Christan Basso y Víctor Winograd supo concebir hace exactamente 20 años uno de los diez mejores discos que ha dado la historia del rock nacional con Escenas de la vida amorosa, que contiene verdaderas gemas como "Amar es difícil", "El bar de la calle Rodney", "Los mejores amigos", "Delicado", "El viaje", "Ella", "Llora", y así uno podría nombrar cada uno de los 14 tracks de ese CD sin lugar a dudas. Y como se trata de un gran trabajo discográfico, Diego recupera alguna de esas canciones en sus shows actuales. ¿Suelen aparecer recuerdos de aquellos días? "Sí, recientemente estuvimos en ION grabando para el programa de Lalo Mir, por el Canal Encuentro (Encuentro en el estudio), y fue volver a entrar con muchísima emoción y ése es un gran disco de canciones. Es cierto, la cantidad de temas que contiene ese disco, de los cuales todo el tiempo voy recogiendo alguno. Ahora estamos tocando ‘Mira las nubes’, y seguramente haga una reversión de ‘Escenas de la vida amorosa’. Es un enorme disco de canciones que marcó para mí una etapa crucial y es como el nacimiento de La Portuaria como grupo masivo con ‘El bar de la calle Rodney’. Por eso mis recuerdos hacia él son muy buenos”, comenta a Diagonales el cantante promediando la charla telefónica antes de su arribo a la ciudad. En el marco de la gira presentación de Escenas de la vida amorosa, el trío brindó un show épico en diciembre de 1992 en el Anfiteatro de la República de los Niños. Intenso, como siguieron siendo los shows de la banda y como es el modo en que Diego se sumerge en las canciones.
“Me has perdido/ sólo quedan las palabras/ que vacías de sentido/ mueca sólo son./ Y es que ahora/ sólo queda un esqueleto/ que dormita en las cenizas/ de otro tiempo,/ imagínate./ Olvídame, olvídame/ cambia mi rostro en tu recuerdo/ olvídame, deshaceme, deshaceme/ otra vez./ Solo sos/ de los que cuentan este sueño/ navegando en la profundidad/ de las aguas inquietas del alma./ Dejame ir, corre después/ encuentra tu signo/ y no dejes que nada nunca/ te aleje de él”, repite desde “Olvídame” primer corte de este disco en el que conviven en armonía guitarras acústicas, eléctricas y ukeleles. ¿Un trabajo introspectivo? “No sé si es un disco introspectivo. Creo que es un trabajo que nace de la introspección pero con una fuerza expansiva. No es un disco metido para adentro ni cantado en voz baja, es un disco claramente solista, de canciones, con una poética creo profunda. Claramente no es un disco para bailar aunque la función rítmica y el groove están metidos en mí porque los llevo en mi historia, en mi sangre, a pesar que por momentos los tempos son más lentos, más reposados. Lo que está priorizado es la fuerza de la canción misma y no el agite, o una invitación para el dancing. Realmente es un disco para ser escuchado”.
–¿Cómo definiría El día después?
–Es un disco acústico, basado en la guitarra acústica pero con muchas texturas eléctricas de fondo, con orquestación, cuerdas. Es un disco que revela una intimidad pero no es absolutamente calmo. Tiene un trabajo intenso entre la instrumentación y los colores para buscar una sonoridad nueva y distinta sobre todo desde las percusiones y desde las baterías. Siento que tiene aires del rock más primigenio y primitivo, hasta algunos retazos del folclore, folk y pensamiento abstracto, minimalista en muchos casos y hasta contemporáneo en el pensamiento como se compone o se piensa en muchos casos la música electrónica o la música serial.
“No me rindo ante este mundo/ violento, profundo/ no me rindo ante las cosas/ de un mundo bello y frágil como vos/ buscando un cielo en una avenida/ un mundo entero en un subterráneo/ buscando ser lo que quiero ser”, cantaba Diego hace 15 años, cuando aún en La Portuaria, editó su primer trabajo en solitario Diego Frenkel, un gran disco de canciones (parece redundante, pero él se empeña en enrostrarnos canciones deliciosamente perdurables). “El día después tiene una conexión, es un nuevo temperamento. El disco anterior yo creo que es más nostálgico, por momentos está cansado en voz baja, está basado más en la herida y en el dolor. Por momentos es mucho más luminoso, también es más épico. Pero soy el mismo en esencia que va cambiando”.
Nuevas voces. El día después cuenta con la participación de Lisandro Aristimuño, ¿cómo se dio ese encuentro?, ¿cómo resultó? “Eso fue genial, el resultado de muchos encuentros e investigación y retazos de ideas de canciones afuera que quedaron para que emerja este tema que es tan lindo que fue estrenado recién ahora el sábado pasado, se llama ‘Entre tus huesos’, compuesto música y letra por los dos”.
A lo largo de la entrevista Frenkel no anda con rodeos y responde con simpleza, pero no con una abandonada sino con una en la que las palabras se amoldan a la perfección. Por eso no extraña su aguda reflexión a la hora de analizar la actualidad del rock que brota por estas tierras. "Veo un poco dividido el tema del rock y de la música en el sentido de que por un lado hay una fuerza alternativa grande de cantautores, en el que hace ya un tiempo está Lisandro, en la que se afirmó Juana Molina y en la que van apareciendo grupos como Paula Maffía con su Mostra y otros tantos que yo voy conociendo por ahí, muchas cantantes femeninas, músicos electrónicos, otros que trabajan con el teatro o con el cine; y por otro lado el rock más popular y comercial me parece que se ancló, pero más que nada gracias a los medios y no solamente a los músicos en resaltar un rock and roll infantil, a veces retrógrado de letras intrascendentes y sonsas y con muy poca actitud de cambio revolucionario, con un carácter más bien conservador, de rock callejero y facilista que no me parece que represente a toda la música en la Argentina pero que es lo que los medios han resaltado en los últimos años también producto de una especie de pauperización cultural y a la cual creo que tenemos que superar un poco y volver a imprimirle un sentido más artístico, y más denso, y más cargado de música”.
Tal como lo plantea Diego, la culpa no sería solo del chancho, tal como se referencia popularmente sino que buena parte de responsabilidad la tienen los medios, y gran parte de razón tiene cuando un número considerable de buena música no accede a determinados lugares, espacios y publicaciones. Una suerte de antídoto para ese mal moderno es Internet, ¿no? “Es como la herramienta que le queda a todo el mundo independiente, menos digitado y manipulado por los grandes medios y compañías. Es importante pero para mí está lo otro, pelearla, el espacio físico y el contacto en vivo y en directo. Yo creo mucho más en la realidad tocable y tangible, y en las reuniones humanas que en las redes sociales como formas de transmisión energética, lo demás es solamente comunicación”.
Frenkel regresa el próximo sábado, y su sola visita invita a ir a su encuentro. “Vamos a hacer un show acústico, íntimo, en trío o en cuarteto, lo estamos definiendo, pero lo venimos haciendo por todo el país y lo más hermoso que tiene es la tremenda proximidad con la gente y la exposición que le da a las canciones en ese formato. Vamos a tocar casi todo el disco El día después, y por supuesto un montón de versiones de muchos clásicos de La Portuaria y míos solistas como ‘A través de tus ojos’, ‘Llévame a lo hondo’, y un montón de material que en este formato ha tomado un carácter nuevo y distinto”.
muy buena nota
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